En noviembre y diciembre vamos a entrenarnos en dos fortalezas muy, muy importantes: el autocontrol y la capacidad de perdonar. Ambas fortalezas nos van a ayudar a conocernos, a relacionarnos con los demás y a reforzar el resto de fortalezas.
¿Qué es el AUTOCONTROL?
Entendemos el autocontrol como: " la capacidad para regular los propios sentimientos y acciones, ser disciplinados, controlar los impulsos y las emociones". (Aulas Felices)
El curso pasado ya hablamos de autocontrol, inteligencia emocional y social. E incluimos aqui el enlace para que puedas visitar la entrada anterior.
El autocontrol es la fortaleza transversal que guía al resto de fortalezas, porque autorregula la propia conducta. Se centra en el "YO", como director, guía, piloto,... gobernante de nuestras acciones: pensar, sentir y actuar, sin influencias externas.
Y para poder dirigirnos, para poder autocontrolarnos es importante seguir un proceso que da respuesta a tres tipos de preguntas que se relacionan con:
- la toma de decisiones
- la planificación y la resolución
- y el autoconocimiento
Es un proceso elaborado que requiere entrenamiento y práctica. Y es aquí donde los adultos tenemos una misión decisiva, para ayudarles a reconocer sentimientos y emociones, que en los más pequeños dirigen su conducta de forma impulsiva y con poca reflexión.
¿Cómo podemos ayudarles?
Sirviendo de "entrenadores cognitivos", guiándoles hasta que lleguen a una madurez suficiente como para realizarlo por sí solos. Y tomando conciencia de que en casa pueden convertirse en mejores oyentes, aprender a enfocar su atención, persistir en las tareas de aprendizaje e interactuar de manera más positiva con sus compañeros, si pensamos que todas estas habilidades están directamente relacionadas con el control de nuestra conducta.
¿Qué estrategias pueden ayudar a los niños a desarrollar sus habilidades de autorregulación?
- Hablar con claridad, frecuencia y sencillez sobre los comportamientos importantes. Algunos ejemplos serían: "El tiempo de lectura es tiempo de silencio", "Hay que turnarse los juguetes favoritos", "Ahora es el momento de escuchar y seguir instrucciones" "Nos sentimos felices cuando ayudamos a los demás" . Se deben mantener unas reglas y expectativas sencillas y hay que recordarle a los niños cuando es el momento de seguirlas.
- Establecer rutinas. Los niños pequeños no utilizan el reloj, pero si entienden de cadencias de un horario regular. Los niños más activos permanecen sentados y atentos a un cuento cuando saben que el juego libre en rincones va seguido de la hora del cuento.
- Hacer un juego de ello. Existen numerosos juegos que permiten realizar el control del cuerpo, de la voz y de sus mentes mientras se están divirtiendo.
OTROS JUEGOS DE AUTOCONTROL
- Simón dice...Tenemos que hacer lo que dice Simón, que será el niño que dirige la acción y los demás le siguen, tiene que hacer lo que él dice (salta, canta,..). Se va rotando al niño/a que dirige, siempre se utiliza la frase "Simón dice.."
- El baile de los congelados.... Bailamos al ritmo de la música hasta que se para y ¡nos congelamos!
- Carrera de caracoles.....En esta actividad lo importante no es ganar, sino perder. Todos los participantes en la línea de salida, y al dar la señal, tendrán que salir hacia la meta, hay que llegar el último, pero está prohibido estarse quieto.
- "Al escondite inglés, sin mover las manos ni los pies". Un participante se tapa los ojos y se sitúa en una pared, dando la espalda al resto de partipantes. Cuando dice esta frase, los demás avanzan hacia él, cuando se da la vuelta, todos se paran, sin moverse, porque si no le toca "llevarla".
- Jenga o Torre aquamarina (variedad con piezas y dados de colores para los más pequeños). Es un juego de mesa, de habilidad y control del movimiento, en el que hay que quitar las piezas sin que se derrumbe la torre y colocarlas en la parte de arriba.
- El mikado: Juego de mesa, de habilidad y precisión, para los más mayores, en el que se utilizan palillos de colores, hay que soltarlos en la mesa y despues cada participante trata de retirar de uno en uno, sin que se mueve ninguno de los que hay a su alrededor. Los palillos se pueden sustituir con rotuladores o pinturas.
Además de los juegos, otras actividades como tocar instrumentos, dibujar, hacer deporte o actividades físicas son igual de beneficiosos para desarrollar el autocontrol en todas las edades.
Además de los juegos, en el alumnado de más edad, la técnica de la autoinstrucción va a ayudarle a tomar conciencia de qué tiene que hacer y cómo lo tiene que hacer, evitando que actué de forma impulsiva.
Libros sobre autocontrol
Algunas ideas son utilizadas en clase para trabajar el autocontrol,
- Los llaveros o carteles que nos guían en resolver conflictos:
Seguimos cada uno de los pasos: me relajo, ¿qué veo?, ¿Cómo me siento?,¿qué necesito?, ¿Qué voy a hacer?
- El medidor de emociones: El colibrí es uno de los pájaros más bellos por la variedad en el color de sus plumas, es por eso que lo hemos elegido para representar la variedad de sentimientos y emociones que podemos sentir. Aun así nos hemos centrado en 6 colores para identificar nuestros sentimientos, y darle respuesta a cada uno de ellos.
- Emociómetro: Descubrimos como nos sentimos, y con imágenes no ayudamos a regular nuestra conducta. 
- La caja de la calma: Puede incluir todo aquello que nos tranquilice, y haga que recuperemos la calma. Puede ser una cubeta de agua, una caja con arena, objetos como una bola antiestrés, un peluche, un objeto que gira, un pendrive con música, unas gafas, ...
CORTOS DE AUTOCONTROL
DONALD DUCK. Self Control
Little Icarus
The easy life
LAS CAPACIDADES DE PERDONAR Y... DE PEDIR PERDÓN
Educamos a los niños y niñas a ser seguros y a no tener miedo, a expresar lo que piensan.
Sin olvidar que tiene que ser desde el respeto y la asertividad, respetando los derechos de los demás, desde el valor de la honestidad.
Como educadores (familia, profesores) debemos enseñarles que no todo vale, y que sus comportamientos tienen unas consecuencias y conlleva una responsabilidad.
Hasta ahí, todo va bien. Pero, ¿qué ocurre cuando el respeto a los demás se ve dañado? La comunicación es esencial, para expresar tanto los sentimientos que les ha llevado a invadir el derecho de los demás, cómo a expresar cómo nos sentimos por estar afectados.
Es aquí donde es esencial que conozcan los límites, que no es otra cosa que el respeto de las normas y los derechos que tenemos todos.
PERDONAR implica una liberación para quien cometió el error, y libera a la persona que perdona.
Martin Luther King: "el que es incapaz de perdonar, es incapaz de amar".
Las consecuencias de no perdonar lleva a sentimientos de rencor y resentimiento. Pero ..¿Cómo aprender a perdonar? Saber perdonar es una actitud, es una decisión que nos permite crecer porque se elige aceptar el pasado y seguir adelante.
Decía Buda que "empeñarse en la ira es como aferrarse a un carbón ardiente para arrojárselo a otro: quien se quema eres tú"
Al aprender a perdonar, aprendemos a transformar las experiencias negativas en oportunidades para aprender y crecer como personas, para ser más resilientes. Además aprenderemos a ser más flexibles mentalmente, intentando ponernos en la situación de la otra persona, intentando entender, si es posible, su forma de actuar.
En todo este proceso, de nuevo, necesitamos comunicarnos con los niños, explicando situaciones que no entienden, y escuchando sus experiencias, sus sentimientos, y la forma que ellos tienen , sus estrategias, para resolver las situaciones diarias. Ellos se pueden sentir desbordados por las emociones y no entienden que ha pasado, ni por qué.
SECCIÓN DE BIENESTAR Y AUTOCUIDADO
Hoy quiero compartir con vosotros, seguro que muchos conocéis la página Internet Segura for Kids (is4k.es). Es un espacio del Ministerio de Asuntos económicos y transformación digital, dirigida a familias y educadores, con guías de control parental, guías de infancia y de redes sociales. Todas las familias deben conocerla porque ofrece información completa sobre ciberseguridad. Incluyo a continuación el enlace.
- Llavero de autocuidado: Realizado en una sesión con el personal del colegio, pero se adapta tanto a chicos/as más mayores como a adultos. Pretende conocernos emocionalmente y reflexionar sobre aquellos momentos que nos recargan y nos ayudan a superar obstáculos y dificultades (representado por un enchufe). Y por otro lado, recoge el currículo emocional de cada uno, en el que escribiremos en qué somos buenos, nuestras habilidades y estrategias emocionales que nos ayudan y ayudan a los demás, (Ambas ideas extraídas de las prácticas que Marina Criado nos detalla en su libro "En el corazón de mi profe".
